Una de las barreras que se encuentran las personan con diversidad funcional es la asunción de que ellos pueden o no pueden hacer ciertas tareas.
Las personas con diversidad funcional son aquellas que tienen problemas que afectan a la estructura corporal, limitaciones para llevar a cabo acciones cotidiana y dificultades para mantener relaciones sociales con sus iguales. Algunos tipos de diversidad funcional lo son: déficit auditivo, visual, psíquico o motriz, multisensorial y problemas de salud.
En 2019, datos suministrados por American Community Survey, registraron que 40.6 millones de individuos en los Estados Unidos se identificaban con tener alguna diversidad funcional. De estos, solo el 39.2 % estaban empleados.
Las personas con diversidad funcional tienen menos probabilidades de ser empleadas que los trabajadores fuera de este grupo. Hay varios factores que impulsan esta disparidad, incluidas las prácticas de contratación discriminatorias, menos personas de esta comunidad que completan un grado universitario y la falta de espacios de trabajo habilitados y accesibles.
Cómo pueden hacer las empresas los espacios más accesibles e inclusivos:
- instalando rampas permanentes o removibles para superar los cambios de nivel
- ampliar las puertas para acomodar sillas de ruedas, Scooter de movilidad y equipo de asistencia para caminar
- elegir luces que sean lo suficientemente brillantes y que no produzcan deslumbramiento cuando se reflejen en las superficies
- uso de alertas de sonido en ascensores y escaleras eléctricas
- imprimir material en braille o con letras más grandes
- utilizar intérpretes de señas en eventos y reuniones
- incluir subtítulos en presentaciones, videos y otras formas de medios donde se usa sonido para transmitir un mensaje
- permitir tiempo adicional para completar tareas
- utilizar lenguaje claro y sencillo
- proporcionar equipo como máquinas de dictado y bolígrafos inteligentes
Según datos suministrados por Bureau of Labor Statistics (BLS), en julio de 2022, la tasa de desempleo en personas con diversidad funcional ascendía a 7.8 en comparación a un 3.6 de persona fuera de este grupo.
Sin embargo, un reporte de la Universidad de Rutgers señaló que antes de la pandemia, las personas con diversidad funcional tenían más flexibilidad para ser contratados para trabajar remoto que el sector sin diversidad.
Crear espacios accesibles e inclusivos es importante tanto a nivel humano como empresarial, económico y social. Aunque, la tasa de desempleo en este grupo es alta muchas personas con diversidad están incluidas en el mundo laboral con éxito y con plena satisfacción de sus empleadores. Para las empresas, la contratación de personas con diversidad presenta una imagen de inclusividad que demuestra su compromiso con la sociedad y con esta comunidad.
Ciertamente, todavía queda muchos cambios por implementar, pero las nuevas regulaciones destinadas a eliminar o suprimir las barreras en los espacios laborales y públicos han permitido el acceso justo y adecuado a la comunidad con diversidad funcional.
